domingo, 26 de octubre de 2014

De Bilbao a Estella corriendo por la vía verde del Ferrocarril Vasco Navarro

Reza un proverbio árabe: "No abras los labios si no estás seguro de que lo que vas a decir es más hermoso que el silencio.". Comparto la opinión, y esa es la razón por la que no he escrito en el blog desde abril, cuando hablaba de cómo calcular el ritmo al que correr el maratón. En esta ocasión vengo con un tema menos técnico y más interesante para los profanos (aunque quizá estos no lo lean, quien sabe…)

Hay que vivir cerca de donde trabajas; para que puedas ir caminando a trabajar. Ese es el ideal, comenzar la mañana desentumeciendo las piernas dando un pequeño paseo hasta el curro, en lugar de esperando la llegada del metro, bus, tranvía, avión, etc.

En mi caso lo tengo difícil, pues dependo del transporte  por carretera para estar en disposición de poder encender el ordenador del trabajo. Y no es moco de pavo, pues son 70 kms, que gracias a la autopista, y salvo imponderables cíclicos (nieve en invierno, atascos en verano) se ventilan en una hora más o menos. Aún así siempre he tenido la ilusión de poder ir andando a la faena, o por lo menos corriendo, me dije un día, Y así surgió la idea ¿porqué no recorrer la distancia autobusera habitual con las zapatillas de correr? Y me puse a mirar los mapas, ¿Podría ir de Bilbao a Vitoria corriendo? Y ¿se contentaría un bilbaino (exagerado, además) con eso?

Pues bien, aquí estamos, aporreando el teclado del ordenador, para contar en esta entrada del blog mi intención de correr desde Bilbao a Estella en cuatro días. Dos días para llegar a Vitoria por rutas no habituales para mí, y otros dos días para, a través de la vía verde del Ferrocarril Vasco Navarro, plantarme en Estella a buscar el regado de Reyes.

Saldré del Guggenheim el 2 de enero, y aquí, en Instagram (@ssebasmm) y hasta puede que en twitter (@ssebasmm) iré colgando las fotos del evento. (31/12/2013)